Primera crisis del euro
'The Economist' pide liderazgo a Zapatero para superar la "desidia y la paranoia"
El semanario publica tres artículos sobre la situación de la economía española en los que reconoce que España no es Grecia pero cree que es el mejor ejemplo de la crisis y critica la reacción "confusa y temblorosa" del Gobierno
EL PAÍS - Madrid - 11/02/2010


El Gobierno español no gana para disgustos en la prensa internacional. Ahora que José Luis Rodríguez Zapatero ha conseguido convertir la participación de España en el rescate de Grecia en la prueba de la "solvencia y fortaleza" de las finanzas españolas y después de que la ministra de Economía Elena Salgado sedujese a la directiva de Financial Times durante su reciente visita a Londres, The Economist vuelve a la carga.


Zapatero subraya el compromiso de España con Grecia y la solvencia de la economía española
La posición crítica del FT da un viraje tras la visita de Salgado
'The Economist' también carga contra el liderazgo europeo de Zapatero
'The Economist': "España es el nuevo enfermo de Europa"

Zapatero dice que ayudará a salvar a Grecia como la UE haría con España
José Luis Rodríguez Zapatero

A FONDO
Nacimiento: 04-08-1960 Lugar: Valladolid



No es la primera vez que la publicación apunta a España, a la que ya llamó "el enfermo de Europa" , ni a Zapatero, de cuyo liderazgo europeo, de turno, ya dudó.

Ahora, en tres duros artículos, el semanario británico acusa al Gobierno español de no haber sabido ver la crisis y de reaccionar después con "desidia y paranoia". En el primero de los artículos, titulado The Zapping of Zapatero la publicación reconoce que la economía española es "más de cuatro veces la griega y que, como se ha molestado en subrayar el Ejecutivo por activa y por pasiva, "España no es Grecia", su endeudamiento es menor que el de EE UU y no ha tenido que recurrir al rescate de su sistema financiero. Hasta ahí las alabanzas. Sin embargo, también se subraya que el paro en España (19,5%) es el más alto de la eurozona, que el déficit se ha disparado hasta el 11,4% y que la economía aún se encuentra en recesión.

La situación se complica, según The Economist, porque el Gobierno "no vio venir el desastre" y cuando llegó reaccionó con "temblorosa confusión, lanzando de manera abrupta un plan de austeridad y un vago plan de acción para la reforma del mercado laboral sólo para retirarlo poco después al primer atisbo de protesta".

El segundo, más informativo y titulado Muddle obscures message (La confusión oculta el mensaje) expone la situación de debilidad en la que se encuentra el Gobierno y el miedo de Zapatero a que, como le ocurrió a sus predecesores, se enfrente a una huelga general. El semanario lanza aquí una primera recomendación: "No se puede mantener contento al mismo tiempo a los sindicatos y a los mercados".

En So hard to bend (Demasiado rígido para ceder), los analistas de The Economist (la publicación no firma sus informaciones) considera que España reúne los problemas de todo el continente en un solo país: sus consumidores están altamente endeudados por sus hipotecas como los irlandeses, sus trabajadores tienen una productividad baja como los portugueses o los griegos y les falta formación como a los italianos. Sin embargo, la rigidez y dualidad del mercado laboral es más acentuada en España y es ahí donde está, para The Economist el origen de la alta tasa de paro. La publicación no se olvida en criticar el acuerdo al que llegaron sindicatos y patronal para subir los salarios.

Termina el primer artículo con una invitación a que Zapatero asuma el liderazgo al igual que hicieron otros presidentes como Felipe González y le pide que no posponga la toma de decisiones estructurales. Un último aviso, para el jefe del Ejecutivo, igual también para la sociedad española: "Retrasar el dolor sólo lo aumentará".