"Le queda poco tiempo"

El 23 de diciembre, el influyente semanario alemán Der Spiegel publicó un artículo de Walter Mayr, corresponsal en Italia sobre la actual crisis de la Iglesia, en el que habla de la creciente resistencia a las reformas del Papa Francisco. Pueden ver aquí el artículo original, y aquí una síntesis en inglés. A continuación, va una síntesis en español tomada del blog Catholicus:

En un círculo muy pequeño, se dice que Francisco ha hecho auto-crítica explicándose a sí mismo de la siguiente manera: "No hay que excluir que pase a la Historia como el que dividió a la Iglesia Católica"Mayr opina que el Papa, por no responder a las dubia, en el pecado lleva la penitencia, como diríamos en español, traduciéndose ésta en incomprensión y más aislamiento.
Por su parte, el Cardenal Walter Brandmüller, uno de los firmantes de las dubia, que no asistió a la Misa oficiada por el Papa en la capilla Paulina del Vaticano por su 80 cumpleaños debido a su delicado estado (tiene 87 años), en su apartamento junto a la basílica de San Pedro dijo a Mayr lo siguente: en la verdad "se trata de todo o nada" ["es geht um die Wurst"], por decirlo en términos coloquiales. Es decir, se trata del "núcleo de todo, de la enseñanza de la Doctrina".
Además, agrega Mayr, el Papa Francisco -junto con el cardenal Walter Kasper- desea "suavizar los preceptos centrales de la fe católica y dejar a los obispos y sacerdotes locales la tarea de interpretarlos para la vida cotidiana de la gente". Enfoque que, según Brandmüller, ataca la base misma de la Iglesia universal:
"Quien piense que el adulterio persistente y la recepción de la Santa Comunión son compatibles es un hereje y promueve el cisma". La Santa Escritura, de acuerdo con Brandmüller, no es un lugar donde todo el mundo pueda elegir lo que le gusta: "Somos, de acuerdo con la Apóstol San Pablo, administradores de los misterios de Dios, pero no poseedores del derecho de disponer de ellos" (o 'de rechazarlos').
En opinión de Mayr, "hay mucho en juego". Para él, "Francisco parece estar cada vez más aislado" y también "desgastado". Un confidente del papa le ha dicho a Mayr: "Muchos ya no reconocen en el Francisco del año 2016 al hombre que eligieron en 2013". El periodista también describe cómo el Año de la Misericordia "ha dejado todo abierto" y "no ha cubierto en absoluto las expectativas". La reforma curial tampoco avanza; y, "desde algunos dicasterios, ahora llegan informes del 'caos total'". Según Mayr, "la volubilidad de Francisco causa problemas adicionales"; sus comentarios sobre los medios de comunicación y su tendencia hacia la "coprofagia" han causado indignación incluso entre sus acérrimos seguidores.
Según Der Spiegel, Francisco "aún está luchando por su legado". Trabaja desde las 5 de la mañana. "No le queda mucho tiempo", dice Mayr. Pero el Papa Francisco todavía podría tener algunas sorpresas para nosotros. Y, a continuación, el artículo de Der Spiegel concluye con las palabras recientemente atribuidas a Francisco y citadas más arriba: "No hay que excluir que pase a la Historia como el que dividió a la Iglesia Católica".