Reflexiones sobre la derrota

La derrota que hemos sufrido ha sido catastrófica y, probablemente, irrecuperable. Y hablo de “nuestra” derrota porque no solamente fue derrotada la Orden de Malta sino también una de las más esperanzadoras posibilidades de resistencia a los desmanes bergoglianos. 
Es necesaria una reflexión sincera acerca de lo sucedido, que no tema ver lo que efectivamente ocurrió y los errores que se cometieron. 

La Orden de Malta, como sabemos, es la única orden de caballería que sobrevive, y que posee un estatuto especial: no es solamente una orden religiosa sino también un sujeto de derecho público internacional, es decir, un país, minúsculo, pero estado soberano al fin.
Si bien hasta épocas recientes podían pertenecer a la Orden solamente nobles de sangre, con el  tiempo este requisito se fue ablandando. En España, por ejemplo, según tengo entendido, se exigen aún a los postulantes varios cuarteles de nobleza, pero no ocurre lo mismo en los países del Nuevo Mundo. En ellos, como no hay nobleza, en sus comienzos integraron la Orden católicos prominentes que se distinguían por su piedad, su abolengo y sus riquezas. Desde hace algunas décadas, sin embargo, se terminó convirtiendo en un club de millonarios esnob que, sin dejar de hacer algunas obras de caridad, sus intereses pasaban más bien por la figuración social y, en que ocasiones, llegaban a lo bochornoso. En Argentina, por ejemplo, fue admitido como caballero de Gracia Magistral Esteban “Cacho” Caselli y su hijo, un joven de poco más de treinta años, nombrado embajador de la Orden de Malta en Argentina, con todas las prerrogativas -entre ellas, la inmunidad- diplomáticas. Se llegó incluso a discutir la admisión de un funebrero cuyo único mérito que podía acreditar eran que su padre había sido el encargado de proveer las pompas fúnebres a Evita. Si la Orden fuera solamente esto, estaría muy bien entonces su supresión.
Pero vayamos a otra distinción aún más importante: la Orden prevé la existencia de distintos grados de caballeros que sería muy complejo explicar. Lo importante es saber que existen Caballeros de Justicia, que son los que constituyen el primer grado, cuya particularidad es que son propiamente religiosos. Luego de un noviciado y preparación adecuada, realizan los votos de castidad, pobreza y obediencia y, aunque continúan viviendo en sus casas y con sus trabajos habituales, pasan a integrar la comunidad de un priorato o gran priorato. El Gran Maestre de la Orden siempre debe ser un Caballero de Justicia. Son ellos, en realidad, quienes aseguran el carácter religioso de la Orden de Malta, garantizando que ella no termine convirtiéndose en una ONG dedicada al bienestar público. En las últimas décadas, eran ya muy pocos los Caballeros de Justicia; quizás no más de sesenta o setenta y, en su mayoría, ingresaban a este estado personas mayores que habían enviudado y decidían pasar los últimos años de su vida sirviendo a la Orden. 
Finalmente, un tercer elemento para tener en cuenta es la actividad de la Orden de Malta. Y es este un punto crucial que, a mi entender, terminó de definir la batalla con el Papa Francisco. En Argentina, la Orden tienen una casa de acogida para personas con enfermedades terminales y, en mucho países, la actividad asistencial que desarrolla es similar, es decir, mínima. Sin embargo, en otros lugares, es mucho más importante. En Italia, por ejemplo, los caballeros y los voluntarios, poseen una especie de pequeño ejército, con vehículos y uniformes militares, que se dedican a socorrer a las víctimas en ocasión de siniestros. Sin embargo, el caso más importante es Alemania. Allí, la salud pública es asegurada por el Estado nacional a través de terceras instituciones. Es decir, el Estado no tiene hospitales, sino que éstos los poseen y administran ONG como la Cruz Roja, y el Estado los financia. La Orden de Malta es allí una de las organizaciones que mayor peso posee en la salud pública y, consecuentemente, de las que mayor dinero recibe. Son los famosos Malteser.

Los hechos: Ya relatamos en este blog y en toda la blogósfera lo que ocurrió con el Gran Canciller de la Orden, Albrecht Freiherr von Boeselager. En su momento, todos nos congratulamos con el Gran Maestre y con el Cardenal Burke por haber tomado las decisiones que tomaron y por haber enfrentado valientemente los dislates pontificios. Sin embargo, no teníamos la pintura completa. En primer lugar, detrás de la expulsión de Boeselager se encontraba la decisión de Frey Mathew Festing de acentuar el carácter religioso de la Orden lo cual no era aceptado por todos. Los alemanes, que son los que mayor cantidad de dinero aportan, pretenden una orden laica, una suerte de gran ONG católica. Los ingleses, que son los que más caballeros de justicia poseen, pretendían una orden en la que primara aspecto religioso, y esa era la tarea que sea había impuesto el Gran Maestre y en la que estaba empeñado: aumentar las vocaciones a Caballeros de Justicia, que era el modo de asegurar ese carácter religioso-monástico original de la Orden. 

En el Consejo Magistral, el órgano de gobierno de la Orden, la facción alemana estaba en clara minoría. Y siempre lo iba estar, toda vez que el cargo de Gran Maestre es vitalicio y que ellos poseen escasos connacionales que sean religiosos. La perspectiva era, entonces, seguir poniendo millones de euros anualmente y tener escaso margen de autonomía.
Ya con el cuadro completo, podemos darnos cuenta que expulsar a von Boeselager de su cargo no era solamente limpiarse a un progresista, era prácticamente declarar la guerra a Alemania y sus aliados, que son el episcopado alemán y el IOR, el banco vaticano, uno de cuyos directivos es el hermano de Boeselager. Todos ellos se benefician, y no poco, de los millones que fluyen mensualmente del Estado alemán hacia los Malteser
Era previsible entonces que Boeselager chillara, era previsible que con él chillaran todos los obispos alemanes, con Kasper y Marx a la cabeza, era previsible que chillaran los financistas del IOR y era previsible también a quién iba a prestar oídos Bergoglio. Y estas cruciales previsiones aparentemente no fueron tenidas en cuenta por Frey Mathew ni por el cardenal Burke. Esa es la impresión que tengo.
Lo que estaba en juego no era solamente un puesto ceremonial dentro de la Orden; estaba en juego nada menos que el carácter que se pretendía dar a la Orden en el futuro (orden religiosa u ONG), estaba en juego el poder y estaban en juego millones de euros. Es doloroso admitirlo pero, más allá de la justicia de la causa, tanto Frey Mathew Festing como su asesor el cardenal Burke, cometieron un error garrafal: le dieron a Bergoglio y a los alemanes la excusa perfecta para tomar el control de la Orden y acabar con cualquier esperanza de reforma de la misma en sentido católico. Cuando un gobernante decide entrar en guerra, de acuerdo al sentido común y a Santo Tomás, debe tener cierta certeza ganarla, y debe prever todos los escenarios posibles de conflicto. 
Al pensar en lo ocurrido, me viene a la memoria el episodio de la Guerra de Malvinas: nadie duda de la justicia de la causa, pero fue un error imperdonable la imprevisión y torpeza de los gobernantes de turno que decidieron, a tontas y a locas, iniciar una guerra nada menos que contra la OTAN. Pasada la batalla, todo fue peor que antes. Si no hubiese habido guerra de Malvinas, lo más probable es que actualmente las islas estuvieran bajo la soberanía argentina. 

Las consecuencias de lo ocurrido son catastróficas. Dejemos de lado lo que ocurrirá con la Orden de Malta, y pensemos lo que ocurrirá con la resistencia a Bergoglio. Quien la lideraba, gustara o no, era el cardenal Burke. Él es quien ha sufrido la derrota más aplastante. No solamente porque Frey Mathew debió renunciar y Boeselager fue repuesto en su cargo, sino porque la Santa Sede designará un delegado apostólico para intervenir en la renovación religiosa de la Orden, lo cual significa el desconocimiento más flagrante a la figura de Burke como cardenal patrono. Burke es hoy día un Don Nadie. Una Eminencia inexistente. Sus dubia no serán respondidas ni siquiera por los monaguillos de la basílica de San Pedro. Su declarada intención de hacer una corrección pública al Papa surtirá, como único efecto, las carcajadas de todo el mundo. Los cardenales y obispos que en un principio lo seguían, desaparecerán abruptamente: nadie se encolumna detrás del mariscal de la derrota.
Peor aún, aquellos obispos, que no eran pocos, que pensaban ofrecer resistencia a los amores de Leticia dejando en claro que en sus diócesis los recasados no podían comulgar, se quedarán callados, o adoptarán la postura contraria, porque no querrán ser identificados con el cardenal leproso y derrotado.
Decíamos en un post anterior que Francisco enviaría a Burke como nuncio a alguna capital africana. No es necesario que lo haga. Más aún, no lo hará porque, en tal caso, le haría el favor de hacerlo desaparecer. Burke quedará donde está, es decir, en ningún lugar, con la única posibilidad y prerrogativa de calzarse un capelo colorado y envolverse en su cauda magna de seda escarlata. 

Corolario: La maldad y astucia satánica con la que ha actuado Bergoglio en este conflicto da susto. Este hombre no se detiene ante nada. Ahora, envalentonado y sin enemigos a la vista, puede llegar a hacer más desastres aún de los que ya hizo. 

OST! YBP! CXR! T! FLK! FX!


Por alguna razón blogger me ha borrado este post varias veces, hoy es un buen día para volver a publicarlo...

Hoy quizá sea uno de los días más importantes de mi vida, así sin más, a medio día muchas cosas van a cambiar y por lo tanto mi futuro, así como muy probablemente mi destino... Se dice que John Lennon se sentaba en su living y en su tocadiscos escuchaba "a whiter shade of pale" varias veces al día, así sin más porque era una de las cosas que más disfrutaba hacer en la vida, yo seguido pongo mis discos favoritos, mis canciones favoritas de fondo mientras hago otras cosas, antes de morro me gustaba sentarme a ver vídeos que me gustaban mucho y creo que siempre me ha gustado leer y escribir algo... 

 Aún recuerdo la primera vez que oí Bitter Sweet Symphony esa sensación extraña que va más allá del nombre de la canción, luego al conocer el vídeo uno no paraba de sorprenderse y descubrir ese sentimiento que se queda y forma parte de nosotros mismos, para siempre, justo como me pasó con Time To Pretend, y con la grandiosa Thrash Unreal, sin duda con varias rolitas de Blink y algunas otras del Boom Boom Kid, quizá son muy pocas esas rolas que te dejan ese sentimiento en el que dices: “ahhh por estas cosas es que vale la pena vivir” son mi himno, mi mantra... 

Ese sentimiento se me queda muy clavado, canciones que describen a uno al cien por ciento, que parece que las hicieron viendo nuestras vidas, el Cuarteto de Nos tiene ese don para describir esa nostalgia por cosas que nunca viví, o por cosas que estoy viviendo ahora mismo o quizá nunca conozca, o cosas que no quiero que me pasen. En fin que hoy es un día muy especial para mí, la culminación de mucho trabajo y sin duda el día de hoy lo voy a musicalizar con algunas de mis canciones favoritas, ya lo he dicho antes, hay canciones que coinciden con ciertos momentos y terminan siendo el soundtrack de tu vida, de ahí que existan canciones de las que no nos podremos olvidar nunca, ni queremos que se nos olviden, y serán nuestras favoritas por siempre, para algunos será una canción de Radiohead, de Nirvana, Weezer, Bob Marley o del grupo que sea que estén pensando en este momento, seguramente ya te paso, que empiezas a hacer cuentas y dices “aquí es cuando me empezó a gustar la música a otro nivel”, cuando descubrí a:_____________________, pues la música muchas veces congela momentos, nos teletransporta a escenarios que quizá creíamos olvidar, y espero hoy tener una buena canción para celebrar, para no olvidar y poder recordar este día. 

¿Qué canción va a ser esa con la que recuerde el día de hoy? Me quede pensando cuando en mi casa contrataron la tv de paga, conocer ese Mtv, ver a “gente que sabía” de música y de cine y de casi todo :P no lo niego, yo quería esa chamba, compraba mis discos, mis playeras y luego llegaba a casa y veía vídeos que me gustaban mucho y decía: ah caray, eso no pasa en los libros, es más eso no me pasa nunca ni en mi cabeza, que chido esa capacidad para sorprendernos, conocer cosas nuevas, cosas que creías imposibles y transportarnos a otro lugar; ¿pero no es así como nos sentimos todos cuando ponemos esa canción en nuestros auriculares?, solo queremos dejarnos llevar a otro lugar, muchas veces uno mejor, hasta sabemos cómo podría ser el vídeo exacto para esa canción... 

Hay veces que los posts tienen 20 comentarios bien rápido, hay otros que pasa el mes entero y solo tiene 3 y uno de ellos es mío :P, cuando vuelva a leer este post, recordare en especial que el pinche youtube en este tiempo te saturaba con su publicidad horrorosa, y que Mtv ya no pone videos chingones de bandas que me gustan, que volví a adquirir ese gusto por el té, que mis pulseritas necesitan una renovada, que disfruto un chingo de mi blog y de pendejear en internet, poder conocer gente nueva y llenarme de ideas locas sin fronteras, que ya no veo tv, ahora solo hay realities chafas en ese canal que antes me gustaba, en la radio solo oímos a los hípster que no lo son, discutiendo (presumiendo más bien), sobre canciones que quizá ni a ellos les gusta, pero que tú no puedes conseguir, carajo, y en el puesto de revistas ya no hay una sola publicación chida con notas que me llamen la atención, ahora pareciera que no me gusta nada de lo que ponen en todos lados, no lo sé, quizá el que está mal soy yo, pero quizá también por eso me gusta tanto el yobailopogo! ;D no es mamada, pero acá trato de compartir todo lo que me gusta, sacar muchas cosas que tengo dentro y hoy en especial, quiero decirme a mí mismo que no todo está tan jodido, que hay por ahí aun cosas chidas, como la rola que quizá ando oyendo ahorita, y me va a dar ese empujoncito de fuerza y de suerte que sé que voy a necesitar en estos momentos y así mismo sé que hay alguien ahí en alguna parte del mundo que se pregunta por qué el post de hoy salió tan tarde, pues sin más está es la razón... 

La verdad es que yo no sé qué quiero de mi vida, en verdad que no lo sé, pero sí sé que es lo que no quiero… Soy solo un wey de esos que te topas diario en la calle con un chingo de inseguridades y ganas de pasarla bien, que se arrepiente de muchas cosas y que se la pasa coleccionando manías y obsesiones, que disfruta a madres de ver pelis, escuchar música y salir a dar el rol por donde pueda, por ahí andaré cargando alguno de mis libros, observando mis cicatrices extrañas, esas marcas que ni yo sé bien de donde salieron o como me las hice, pero sé que al intentar acordarme seguramente me sacaran alguna risa, pues me acordare de una peda, un concierto, un momento con mis amigos, justo como hoy, con los audífonos bien puestos tarareando alguna rola, ¿Qué rola voy a poner hoy? 

A veces solo quiero andar haciéndome bien pendejo un ratote, luego se me quitan las ganas de todo, ahhhh ahorita me acorde de Fight Club ;D nada como tomarse un tiempo y disfrutar de las cosas que a uno le gustan, pinche Chojin es la onda, que buenas rolas tiene, ojala pueda ver pronto esa peli de nuevo, y ver a esa banda que le traigo tantas ganas de ver en vivo, es de esas cosas que quiero hacer antes de morir, sé que vida solo hay una y la quiero vivir a mi manera, haciendo lo que me plazca sin importar el qué dirán. 

 Luego si digo: “Ya estoy hasta la madre de tantos pinches problemas pendejos” quizá no llegue a fin de año, o ni a mi próximo cumpleaños y no es que tenga tantos pedos como los que Jay-Z nos relata en sus 99 problems, aunque cada quien podría arreglar la letra a su antojo, y no, no son competencias, no se trata de ver quien sufre más o quien la lleva más culera, ya lo comentamos por aquí muchas veces: la vida es una mierda a cualquier edad, en cualquier lugar, para todos y así lo será para siempre, en serio, pero tampoco son carreritas, vivir no es una carrera de velocidad, en todo caso es de resistencia, y hay que encontrar esas cosas, a esas personas, esas canciones, esos libros, esas pelis, esos lugares, esos momentos que valgan la pena, para seguir adelante, como lo que va a pasar hoy, ya en un rato, híjole ya es ahorita, chale la incertidumbre pesa, siento mis labios secos, ando tenso, se me mueve todo el cuerpo :P pero sé que voy a tener a mis amigos conmigo, ya sobrevivimos a muchas cosas más antes y vamos a salir de ésta seguramente también, brindaremos, cantaremos y bailaremos con esa canción, esa que va a sonar hoy, ¿Cuál va a ser? Algún día les mandare saludos desde Ushuaia y les contare, que estoy bien, que lo logre, que los sueños si se hacen realidad, que la felicidad si existe, que la vida vale la pena por momentos como este…



*entrada publicada originalmente el 27/08/2012


Yobailopogo!
-hay demasiada belleza para renunciar-

Hooper en Malta


Su Alteza Eminentísima, fra’ Mathew Festing, Príncipe y Gran Maestre de la Soberana Orden militar y hospitalaria de San Juan de Jerusalén, de Rodas y de Malta, renunció ayer a su cargo luego del pedido que le hiciera en ese sentido el Papa Francisco.
No renunció, según han dicho algunos, por cobardía o poca capacidad de resistencia. Renunció porque como Caballero de Justicia, estaba atado a la Iglesia por los tres votos y, por tanto, frente a una orden directa del Santo Padre, no le quedó otra opción que obedecer. Un caballero es fiel a sus promesas. 
Este hecho, es lamentable decirlo, significa el fin de casi milenaria orden. Lo que no pudieron hacer los musulmanes en Jerusalén y en Rodas, y lo que no pudo hacer Napoleón en Malta, lo ha podido hacer Bergoglio. Esa es la triste realidad.
Analicemos los hechos:
Desde el punto de vista de la Orden, creo que se actuó con torpeza y error de cálculo. No calcularon con quién estaban tratando; no calibraron la extrema peligrosidad y maldad de Bergoglio. Es verdad que la Santa Sede no podía intervenir en un asunto interno de la Orden como fue la defenestración del Canciller por parte del Gran Maestre, pero no pensaron que el mismo Gran Maestre era religioso y estaba atado por el voto de obediencia. Es decir, que podía pasar lo que pasó. O, si lo pensaron, no creyeron que Bergoglio iba a llegar a tanto.
Por parte de Bergoglio, es una gran victoria en dos frentes. Con respecto a la Orden de Malta, la descabeza. No me extrañaría que en virtud del voto de obediencia pidiera la renuncia de todo los caballeros de justicia que integran el Gran Magisterio y así, la Orden quedará en manos del Comisario que él nombre y que procederá a su liquidación.
Sabemos que el Papa le tenía inquina a la Orden desde que era arzobispo de Buenos Aires. Un corazón plebeyo como el suyo no puede soportar la nobleza, y mucho menos la nobleza de sangre. Ahora la tiene totalmente en sus manos. 
Mi pronóstico es que la Orden de Malta desaparecerá como tal y quedará convertida en una multimillonaria ONG católica de ayuda humanitaria. Lo primero que hará el Comisario será cambiar los estatutos, desaparecerán los caballeros y las damas; desaparecerá cualquier requisito de nobleza que aún quedara; desaparecerán los votos, las cogullas negras y los uniformes militares. Desaparecerá como estado soberano y, con ello, desaparecerán sus embajadas y embajadores. Desaparecerá como último resabio de las cruzadas y aportará anualmente millones de dólares a las arcas vaticanas
El segundo frente en el que Bergoglio se anotó un triunfo ha sido en la guerra sorda que libra con el cardenal Burke. De hecho, le ha pegado en su línea de flotación. No sería extraño que, fruto de este escándalo o del cambio de estatuto de la Orden, desapareciera la figura de cardenal patrono, y Burke fuera recluido a algún monasterio o como nuncio en alguna capital africana. 

Conclusión: Dicho al estilo de Evelyn Waugh, Hooper se hizo con Brideshead. La mansión que durante siglos fue habitada por los nobles, se ha convertido ahora en la morada de los Hoopers

Los constructores no sabían los usos a que descendería su obra; hicieron una mansión nueva con las piedras del castillo antiguo, año tras año, generación tras generación, la enriquecieron y extendieron; año tras año crecía la enorme cosecha de maderos en el parque; hasta que, con la helada repentina, llegó la era de Hooper; el lugar quedó en la desolación y el trabajo en la nada: Quomodo sedet sola civitas. “Vanidad de vanidades, todo es vanidad.”

Blair Witch (2016)


015 - Blair Witch  - (2016)


 Tanto misterio, tanto drama para el proyecto secreto y resulto ser una mierda, Blair Witch o La bruja de Blair es de esas pelis que se me pasaron en el cine en el año pasado y me espere a que llegara una versión chida para verla, hijole que mala es, no la vean, abusaron de los cambios de escena y en pleno 2017 aun nos quieren vender la idea de cintas pixeleadas, que mal audio, no es nada nuevo y no asusta nada, si pueden mejor evitenla y chutense otra de las que tengan en pendientes, esta es de lo peor del año sin duda.



Yobailopogo!
 -es mi hermana-

El huevo de Fabergé

La semana pasada fui a una “misa” anglicana en Oxford. No lo hice movido por una repentina pasión ecuménica sino con un propósito estético: el coro del college -uno de los mejores de la ciudad- cantaba la  misa O magnum mysterium de Victoria. 
La “misa” fue celebrada por una “sacerdotisa” asistida por un “diácono”. Ambos vestían dignos ornamentos litúrgicos: casulla y dalmática; cíngulo y alba, debajo de la cual se dejaba ver la sotana. Ambos se comportaban con piedad y reverencia hacia algo que no existía: su propia misa.
La homilía de la capellana fue un buena pieza de oratoria: correctamente preparada y organizada, con buena dicción y con todos los elementos propios de la oratoria sagrada. Fue, además, un sermón ortodoxo. No dijo ninguna herejía, hizo referencias sobrenaturales y más allá de la ineludible corrección política propia del mundo civilizado, fue un sermón cristiano. 
Luego, la “misa” continuó según el rito: ofertorio, prefacio, sanctus, plegaria eucarística con consagración, comunión, bendición, despedida. 
Por supuesto, un espectáculo bellísimo desde lo estético, pero completamente vacío desde lo real: allí no hubo misa; apenas una ceremonia que pretendía imitar los gestos y palabras, como un mimo, de las verdaderas misas que se celebraban en Inglaterra antes de Enrique VIII.
La primera apreciación que me surge es la siguiente: “Pues bien, ellos tendrán toda la belleza que quieran, pero no tienen la realidad. La realidad sacramental la tenemos nosotros, los católicos”. Y es verdad. 
And yet... Cualquier católico de la calle que va el domingo a misa a la iglesia de la vuelta de su casa, en Argentina, Chile, España o cualquier otro país del mundo, se encontrará con un espectáculo desafortunado: guitarras y panderos; voces desafinadas que entonan canciones insulsas; curas vulgares que apenas si preparan sus homilías, convertidas muchas veces en muestrarios de herejías, o de sentimentalismos, o de sociología, y que buscan el agrado de la audiencia, y sus carcajadas y su aprobación. Curas que dejaron de usar la casulla y que apenas usan un alba suelta con estola multicolor al cuello. 
“Pero consagran”, gritará alguno. Y tiene razón. A pesar de todo, consagra, y es misa válida, al menos si desea hacer lo que hace la Iglesia y respeta las fórmulas sacramentales. 
And yet... ¿Puede alguien con verdadera fe católica, revestir voluntariamente con tanta vulgaridad el misterio de la Santa Misa y de la eucaristía? La fe en el misterio sagrado que se está celebrando ¿no exigiría necesariamente muestras exteriores de reverencia y adoración? ¿Puede alguien presentarse ante el Santo de los Santos haciendo payasadas, diciendo pavadas cuando no herejías y vestido como le viene en gana? Me pregunto, entonces, si estos curitas, florecidos en la maravillosa primavera conciliar, tienen verdaderamente fe católica. Concretamente, ¿tienen fe en lo que están celebrando? ¿Creen verdaderamente en la presencia real? 
Los anglicanos, o una parte de ellos, cree en la presencia real, pero no la poseen. Conservaron la cáscara del huevo, un hermoso huevo de Fabergé, es cierto, pero adentro está hueco. No tiene nada. O apenas, un poco de pan y un poco de vino. Nosotros, dirán algunos, fuimos mucho más astutos. Conservamos el interior y nos desprendimos del añejo cascarón con olor a naftalina. “¿Qué es la Misa sino un mecanismo para producir la Eucaristía? Lo importante es que estén las palabras de la consagración; el resto es accidental; puras convenciones culturales. Qué importa, entonces, que el cura bailé el chamamé y diga imbecilidades en el sermón. Lo importante es que diga las palabras mágicas”. Serían estás las palabras del perfecto neocón. 
And yet... Los anglicanos solamente conservaron la cáscara; es verdad, y no les sirven más que de acervo cultural. Nosotros, los Roman Catholics fuimos tan pero tan astutos que tiramos a la basura nada menos que un huevo de Fabergé y creímos que, sin la cáscara, podíamos conservar a la clara y a la yema unidas y saludables. Después de cincuenta años, el interior del huevo casi ha desaparecido, desguarnecido por la ausencia de su cascarón protector, y la obra de arte de Fabergé está en el tacho de la basura.