LIBROS DE NAVIDAD...



LIBRO: VIVIR LA NAVIDAD
AUTOR: RUPNIK, MARKO
PRECIO: $14.95

Este librito, no quiere ser más que una ventana de hoy abierta al misterio siempre vivo del Nacimiento de Cristo. Puede servir como idea para la predicación en días de gran cantidad de trabajo y labor pastoral, como son las festividades navideñas de nuestras comunidades eclesiales.





LIBRO RECOMENDANDO: Y VUELVE LA NAVIDAD
AUTOR: CHIARA LUBLICH
PRECIO: $6.25 +IVU

Un libro para leer y regalar, para descubrir de nuevo el significado de la Navidad.

La Navidad vuelve a ser ilusión y belleza; un florecer de amor, de ansias de actuar y creer. Es la lucides y la felicidad de sentirse en compañía de Otro. Es el gozo y la certeza de la libertad. Es Dios.



CD RECOMENDADO: CANTEMOS EN NAVIDAD VOLUMEN 1 Y 2
AUTOR: GRUPO ENSAMBLE / PAULINAS COLOMBIA
PRECIO: $22 + IVU C/U

Villancicos tradicionales como Cantad, Cantad, El Tamborilero, El Duraznero, entre otros. PARA DISFRUTAR CON LOS MAS CHICOS LA NAVIDAD



LIBRO RECOMENDADO: NAVIDAD FIESTA DE TODOS Y PARA TODOS

AUTOR: CASALA, MARIA INES
PRECIO: $4.75 + IVU

Este libro es fruto de años de trabajos preparatorios a la celebración de la Navidad que han realizado las autoras, en distintos ámbitos y con características socioculturales muy diversas. Está destinado a niños de jardín, nivel inicial y primer ciclo de E.G.B; al trabajo con sus familias y los docentes, y para la comunidad en general. Nos ofrecen novedosos y prácticos recursos para utilizar en cada taller o encuentro, con la intención de ayudar a que se genere un verdadero clima de oración y alegría a la hora de preparar la celebración de la Navidad.

CONSIGUELOS EN PAULINAS ARZUAGA 787.765.4390 / PAULINAS ROOSEVELT787.763.5441 O ESCRIBENOS A PAULINASPR.VM@GMAIL.CO

¡¡ALFAJORES PARA COMPARTIR SONRISAS!!



¿Sabes la importancia de una sonrisa? ¿Sabes que la sonrisa no nace en los labios sino en lo profundo de tu ser? Te contaré como yo lo descubrí.

Suelo venir caminando hasta el trabajo desde la estación de tren o incluso todo el camino desde mi casa. Son unos 45 minutos en los que puedes pensar en muchas cosas... en tu vida, en cómo resolver tus problemas, en los problemas mismos, en la gente con quienes tienes diferencias que tu mismo cualificas como "irreconciliables".

Para ese tiempo a inicios de año también solía escuchar un grupo que hace muy buena música pero que las letras son todo el tiempo de crítica y hasta burla de ciertas situaciones sociales. Entonces yo mezclé ambas cosas esa música y mis problemas. Ese estímulo durante 45 minutos dándole vueltas en la cabeza hacen una gran diferencia en cómo ves la vida y los problemas o situaciones del diario vivir porque te condicionan, te predisponen desde tempranito, te sugestionan y afectan el color del cristal conque miras la vida todas las mañanas.

Decidí cambiar eso y en lugar de tomar el bus con el ajetreo, venir caminando hasta mi trabajo. Cambié el rock por música instrumental o audiolibros. Y la diferencia es ENORME. Me cambió el usual desgano mañanero por ganas de aprender, sonreír, saludar a la gente...

Al inicio probablemente se te hará difícil notar el cambio en ti mism@. Quienes sí lo notarán facilmente son aquellos que interactúan contigo. Por ejemplo, en mi caso, uno de los empleados de un estacionamiento que está muy cerca de mi trabajo me dejó saber con voz tímida: " Usted qué mucho ha cambiado...". Yo sorprendida,no pude hacer más que preguntarle por qué decía eso. El me contestó excusándose por el "atrevimiento" y me dejó saber que por muchos meses me había visto pasar frente a ese local, cabizbaja y pensativa y nunca les había regalado una sonrisa. Y que desde hacía un par de semanas, (desde que los saludaba y les decía buenos días) el descubrió que yo era una buena persona. Yo le agradecí su gesto, le di mi ya acostumbrado buenos días y seguí caminando más contenta de lo que ya venía.

Entonces pensé que al inicio se me hacía bien difícil sonreír porque no encontraba algo que me motivara a hacerlo. Pero las razones para ser feliz no caen del cielo. Ser feliz es una decisión, y las razones las buscas y las encuentras en las pequeñas cosas que te suceden a diario.

Repasa tu vida... tu comportamiento automático de cada día. Hay cosas muy pequeñas que puedes cambiar y que pueden hacer grandes diferencias. Depende de ti.

ALFAJORES DE SONRISA....

Los alfajores de Maizena son los clásicos dulces argentinos especialmente de la ciudad de Santa Fe.

La maizena es harina fina de maíz, también conocida como fécula o almidón de maíz. Al típico alfajor de Maizena se le pasan los bordes con dulce de leche por coco rallado, pero también quedan muy ricos completamente bañados en chocolate.


Dicen que saben mejor luego de varios días en la nevera pues la leche se humedece y le da sabor a la masa. Excelentes para servir con café.

Ingredientes

  • 150 g / 5.3 onzas de mantequilla
  • 2 huevos
  • 100 g / 3.5 onzas de azúcar
  • 100 g / 3.5 onzas de maicena
  • 150 g / 5.3 onzas de harina de trigo
  • ½ cdta de bicarbonato / baking soda
  • 1 cdta de ralladura de limón o vainilla
  • dulce de leche
  • coco rallado

Preparación

  1. Colocamos en un recipiente la mantequilla sin sal, el azúcar y los huevos. Unir con un tenedor, agregar la vainilla o la ralladura, el bicarbonato, el almidón(maicena) y la harina.
  2. Formamos una masa suave, que no se pegue en los dedos.
  3. Envolvemos con un film y llevamos a la heladera por 2 horas. (Cuando más tiempo tenga de heladera, más rico sale).
  4. Sacamos de la heladera, estiramos la masa de 1 cm de espesor, cortamos en círculos con un cortapasta del diámetro que desees.
  5. Acomódalos sobre una placa enmantecada y enharinada, separados 4 cm uno de otro.
  6. Precalentar el horno 10 minutos a 325 - 3550 grados aprox. Dejarlos enfriar y unirlos de a dos untados con dulce de leche.
  7. Pasamos los bordes por coco rallado, y listos para comer.

IDEAS PARA VIVIR EL ADVIENTO


Durante el tiempo de Adviento se puede escoger alguna de las opciones que presentamos a continuación para vivir cada día del Adviento y llegar a la Navidad con un corazón lleno de amor al niño Dios.

1. Pesebre y pajas:

En esta actividad se va a preparar un pesebre para el Niño Dios el día de su nacimiento. El pesebre se elaborará de paja para que al nacer el niño Dios no tenga frío y la paja le dé el calor que necesita. Con las obras buenas de cada uno de los niños, se va a ir preparando el pesebre. Por cada buena obra que hagan los niños, se pone una pajita en el pesebre hasta el día del nacimiento de Cristo.

2. Vitral del Nacimiento:

En algún dibujo en el que se represente el Nacimiento los niños podrán colorear algunas parte de éste cada vez que lleven a cabo una obra buena para irlo completando para la Navidad.

3. Calendario Tradicional de Adviento:

En esta actividad se trata de que los niños hagan ellos mismos un calendario de Adviento en donde marquen los días del Adviento y escriban sus propios propósitos a cumplir. Pueden dibujar en la cartulina el día de Navidad con la escena del nacimiento de Jesús. Los niños diario revisarán los propósitos para ir preparando su corazón a la Navidad. Este calendario lo podrán llevar a la Iglesia el día de Navidad si así lo desean.

Se sugieren los siguientes propósitos:

Ayudaré en casa en aquello que más me cueste trabajo.

Rezaré en familia por la paz del mundo.

Ofreceré mi día por los niños que no tienen papás ni una casa donde vivir.

Obedeceré a mis papás y maestros con alegría.

Compartiré mi almuerzo con una sonrisa a quien le haga falta.

Hoy cumpliré con toda mi tarea sin quejarme.

Ayudaré a mis hermanos en algo que necesiten.

Ofreceré un sacrificio por los sacerdotes.

Rezaré por el Papa.

Daré gracias a Dios por todo lo que me ha dado.

Llevaré a cabo un sacrificio.

Leeré algún pasaje del Evangelio.

Ofreceré una comunión espiritual a Jesús por los que no lo aman.

Daré un juguete o una ropa a un niño que no lo tenga.

No comeré entre comidas.

En lugar de ver la televisión ayudaré a mi mamá en lo que necesite.

Imitaré a Jesús en su perdón cuando alguien me moleste.

Pediré por los que tienen hambre y no comeré dulces.

Rezaré un Ave María para demostrarle a la Virgen cuanto la amo.

Hoy no pelearé con mis hermanos.

Saludaré con cariño a toda persona que me encuentre.

Hoy pediré a la Santísima virgen por mi país.

Leeré el nacimiento de Jesús en el Evangelio de S. Lucas 2, 1-20.

Abriré mi corazón a Jesús para que nazca en él.

4. Los que esperaban a Cristo:

En esta actividad se trata de lograr hacer una lista con 24 ó 28 nombres (dependiendo del número de días del Adviento) de personajes del Antiguo y del Nuevo Testamento que esperaban la venida del Mesías. Se buscarán en la Biblia, se dibujarán los personajes y se recortarán. Atrás, se les pondrá el nombre de quién es y qué dijo o hizo este personaje. Se puede utilizar como juego.

Algunos personajes que se pueden incluir:

Abraham: Dios le dijo a Abraham que su descendencia iba a ser numerosa como las estrella del cielo y lasa arenas del mar, y sí fue.

David: Dios le dijo al rey David que el Mesías iba a ser de su familia.

Isaías: Dios le dijo al profeta Isaías que el Mesías iba a nacer de la Virgen.

Jeremías: Dios le dijo al profeta Jeremías que cuando naciera el Mesías, Él iba a dar a los hombres un corazón nuevo para conocerlo y amarlo mucho.

Ezequiel: Dios le dijo al profeta Ezequiel que el Mesías iba a resucitar.

Miqueas: Dios le dijo al profeta Miqueas en Belén iba a nacer su Hijo.

Oseas: Dios le dijo al profeta Oseas que de Egipto iba a llamar a su Hijo.

Zacarías: Dios le dijo al profeta Zacarías que su hijo iba a entrar en Jerusalén montado en burro.

Hombres Sabios o Reyes Magos: esperaban la venida del Salvador de los hombres.

Los pastores: Fueron avisados por un ángel del gran acontecimiento.



http://www.aciprensa.com/fiestas/Adviento/ideas.htm

Autora: Teresa Fernández

Cambia tu manera de pensar para que cambie tu manera de vivir.


Cambia tu manera de pensar para
que cambie tu manera de vivir. - San Pablo [Rm 12,2]




Cambia tu piloto automático. Para cambiar tu vida debes cambiar tu manera de pensar. Detrás de todo lo que haces hay pensamientos. Toda conducta es motivada por una creencia y toda acción es incitada por una actitud. Dios reveló esto miles de años antes de que los psicólogos lo entendieran: “Tengan cuidado de cómo piensan; la vida es modelada por sus pensamientos”.

Imagina un paseo en un bote con motor en un lago, con el piloto automático puesto en dirección hacia el este. Si decides dar vuelta atrás y dirigirte al oeste, tienes dos posibles maneras de cambiar el rumbo del barco. Una es tomar el timón y físicamente obligarlo a que se dirija en la dirección opuesta a la que señala el programa del piloto automático. A pura fuerza de voluntad podrías vencer al piloto automático, pero sentirías la resistencia todo el tiempo. Finalmente tus brazos se cansarían de la tensión, soltarías el timón y el barco retomaría inmediatamente el rumbo en dirección al este, de acuerdo con su programación interna.

Esto es lo que sucede cuando tratas de cambiar tu vida a fuerza de voluntad. Dices: “Me obligaré a comer menos... haré más ejercicio. Dejaré de ser desorganizado y de ser impuntual”. Sí, tu fuerza de voluntad puede producir un cambio a corto plazo, pero crea una tensión interior constante porque no has tratado la causa desde su raíz. El cambio no se siente como algo natural, así que finalmente te rendirás, abandonarás la dieta, y dejarás de hacer ejercicios. Rápidamente volverás a tus viejos patrones.

Hay una mejor y más fácil manera. Cambia el piloto automático: tu manera de pensar. La Biblia dice: “Dejen que Dios los transforme en una nueva persona, cambiando su forma de pensar”. El primer paso en el crecimiento espiritual es empezar por cambiar la manera de pensar. El cambio siempre comienza en la mente. La manera en que pienses determinará cómo te sientes, y cómo te sientes influirá en cómo actúas. Pablo dijo: “Debe haber una renovación espiritual de sus pensamientos y actitudes”.

Para ser como Cristo debes desarrollar en ti su mente. El Nuevo Testamento llama a este cambio mental arrepentimiento, que en el griego literalmente significa “cambiar tu mentalidad”. Te arrepientes siempre que cambias tu manera de pensar y adoptas la manera de pensar de Dios: con respecto a ti mismo, al pecado, a Dios, a otras personas, a la vida, a tu futuro, y a todo lo demás. Asumes la actitud de Cristo y su perspectiva.

Se nos manda que pensemos “del mismo modo en que pensaba Cristo Jesús”. Este mandamiento tiene dos facetas. La primera faceta de este cambio mental consiste en dejar de los pensamientos inmaduros, que son egoístas. La Biblia dice: “Dejen de pensar como los niños. Sean niños en la malicia, pero sean adultos en su forma de pensar”. Los niños son por naturaleza completamente egoístas. Sólo piensan en sí mismos y en sus propias necesidades. Son incapaces de dar; sólo pueden recibir. Tienen una manera de pensar inmadura. Por desgracia, muchas personas nunca de desarrollan más allá de ese nivel. La Biblia dice que esta manera egoísta de pensar es el origen de conductas pecaminosas: “Los que viven siguiendo sus egos pecaminosos sólo piensan en las cosas que su ego pecaminoso desea”.

La segunda faceta para pensar como Jesús consiste en que empieces a meditar con madurez, enfocándote en otros, no en ti mismo. En su gran capítulo sobre el amor verdadero, Pablo concluyó que pensar en los demás era la señal de madurez: “Cuando yo era un niño, hablaba como niño, pensaba como niño, razonaba como niño. Cuando llegué a ser adulto, dejé atrás las cosas de niño”.

En la actualidad, muchos suponen que la madurez espiritual se mide por la cantidad de información bíblica y doctrina que uno sepa. Si bien el conocimiento es una medida de la madurez, no es todo lo que se necesita. La vida cristiana es mucho más que credos y convicciones; incluye conducta y carácter. Nuestros hechos deben ser congruentes con nuestros credos, y nuestras creencias deben ser respaldadas con una conducta semejante a la de Cristo.

El cristianismo no es una religión, ni una filosofía, sino una relación y un estilo de vida. El centro de ese estilo de vida en pensar en los demás, como lo hizo Jesús, en lugar de pensar en nosotros mismos. La Biblia dice: “Nosotros debemos pensar en el bien de ellos e intentar ayudarlos haciendo lo que les agrada. Ni siquiera Cristo intentaba agradarse”.

Pensar en los demás es la esencia de ser semejantes a Cristo y la mejor evidencia del crecimiento espiritual. Esta manera de pensar es antinatural, va en contra de nuestra cultura, es rala y difícil. Afortunadamente tenemos ayuda: “Dios nos ha dado su Espíritu. Por eso nosotros no pensamos igual que las personas de este mundo”. En los siguientes capítulos miraremos las herramientas que el Espíritu Santo usa para ayudarnos a crecer.

PENSANDO EN MI PROPÓSITO

Punto de reflexión: Nunca es demasiado tarde para empezar a crecer.

Versículo para recordar: “Cambien su manera de pensar para que así cambie su manera de vivir y lleguen a conocer la voluntad de Dios, es decir; lo que es bueno, lo que le es grato, lo que es perfecto”. Romanos 12:2 (DHH)

Pregunta para considerar: ¿Cuál es una de las áreas donde necesito dejar de pensar a mi manera y comenzar a pensar a la manera de Dios?

TEXTO TOMADO DEL BLOG: